No es la primera, ni la última vez que tengo una crisis en mi vida, sin embargo, hay algo en particular que tiene la que estoy atravesando en éste momento, la cual me ha hecho reflexionar sobre todos los hechos que me trajeron a Argentina y el porqué sigo en éstas tierras.
A un poco más de 4.000 k.m de casa me encuentro pensativo el día de hoy. Sentado en la cama esperando la llegada del invierno aquí en Buenos Aires y un poco enfermo por el frio.
En éstos últimos cuatro años, he visto ir y venir a personas de todas las nacionalidades, he recibido innumerables mensajes a través del foro, las redes sociales y mi casilla de correo personal.
En todos los motivos e historias que me transmiten las personas acerca de su deseo para venir a Argentina (bien sea por estudio, trabajo, amor, vida, etc…) me identifico un poco con cada uno. Algunos tienen historias sumamente complicadas, otros están escapando de un «destino» que desconocen, pero, que auguran como oscuro en sus países de origen, los demás, en búsqueda de nuevas posibilidades o experiencias… hay de todo.
Y entonces viene a mi mente «el motivo» por el cual llegué a Argentina en un principio. Aunque es un poco difícil de aceptar (aún) llegué por amor. Me encontraba en el 2008 planeando ir a Europa a través del ICETEX cuando la conocí. Ella, porteña, modelo, bailarina de ballet y sumamente tímida llamó mi atención, nos encontramos en internet porque tenía un proyecto de asistencia remota en sistemas y ella una computadora averiada.
Lo extraño de todo, es que nunca la había visto, la conocí por internet, hablamos por semanas a través de Msn Messenger, hasta que por fin, un día usamos skype y nos vimos por primera vez.
En cada charla, me sentía más interesado y comencé a sentir que mis planes de viajar a Europa se desvanecían poco a poco, estaba totalmente concentrado en conocerla mejor.
Luego de varios meses de charlar, vernos a través de la cámara web, llamadas telefónicas ocasionales, le propuse dejarlo todo para ir a conocerla e intentar tener una relación.
Incrédula, fue su postura. Sin embargo le dije: «Eres la clase de mujer, por la que sería capaz de dejarlo todo». A pocos días, tenía los pasajes de avión en la mano, la desaprobación de mi núcleo familiar y muchísima ansiedad.
Cuando le conté que tenía los pasajes se largó (puso) a llorar, no podía creer que yo estuviese hablando en serio. (Aquí entre nosotros queridos lectores, casi nadie me toma en serio porque siempre digo la verdad).
Y así vendí todo, la computadora que tanto había deseado y que no usé durante mucho tiempo, algunos muebles, dvds, dejé a mis amigos, mi casa, mi barrio, mi familia, mis expectativas de estudiar en Europa y todo lo que conocía para aventurarme a un destino del cual conocía únicamente por referencia a «Maradona».
Algunos dirán que fue una locura, pero, yo considero que, hay ciertas cosas en la vida, ciertas oportunidades que solo se presentan una vez y prefería fracasar o triunfar antes de quedarme con la eterna duda del «que pudo pasar sí…»
Y mi llegada sería el 3 de Noviembre de 2009 cerca de las 4:45 p.m. ella estaba allí esperándome en el aeropuerto con un vestido de flores y sandalias (muy cómodo para Otoño) nos besamos apasionadamente y comenzó nuestra relación que terminaría de forma abrupta y dolorosa tres años más tarde.
Fue la primera vez que estuve totalmente enamorado de alguien y fue también la primera vez que sufriría una decepción amorosa.
El tema es que, ésa decepción sucedió aquí, en la Capital Porteña, donde yo me encontraba solo, arrastrando un par de deudas, sin amigos ni familiares (aunque, en su momento, los compañeros de oficina me ayudaron mucho) en un lugar triste, horrible, llorando la mayor parte del día y recibiendo una nueva experiencia de vida.
Sufrí bastante por ésta ruptura, me encontraba lejos de casa y era casi inconsolable, unas llamadas por Skype a mis viejos amigos no eran suficientes para calmar la sensación del fracaso amoroso. Pasé muchas noches llorando, mañanas angustiosas al levantarme y encerradas en el baño de la oficina para llorar una y otra vez.
Y es que era ése tipo de hombre sentimental que lo entregaba todo sin medir las consecuencias, claramente ésta experiencia cambió mi paradigma de «una relación», no significa que ahora soy un «insensible» pero sí tengo más recaudos y analizo más las cosas.
Después de sufrir por varios meses, me encontré la pregunta clave «¿Acaso no sos nadie sin una mujer al lado?» y en ése momento comenzó el momento de restauración.
Sin embargo, creo que si pudiera regresar al pasado y cambiar mi decisión sobre venir o no a Argentina, yo diría que «Sí» nuevamente.
Porque sin importar cuánto sufrí y cuánto tarde en levantarme la experiencia que me dejó el desamor me abrió una nueva perspectiva de vida y me señaló al «yo interno» que se había perdido en ése ente llamado «relación».
Y es que una relación no es algo en lo que uno se deba dejar absorber completamente, debemos conservar aire, espacio y nuestra individualidad, sino entonces nos perderemos a nosotros mismos.
Cuando comencé a vislumbrar un poco más allá de la crisis, me di cuenta que tenía la posibilidad de regresar a mi patria, con los mios, con mis amigos y familiares, mi gente y mis costumbres quienes me recibirían y me consolarían apropiadamente, el proceso allí no sería tan doloroso como quedarme en Buenos Aires.
Pero elegí lo contrario, si había tomado la valentía y el coraje para venir hasta aquí, tendría el coraje y la valentía para renacer de las cenizas como el Fénix y comenzaría mi vida aquí nuevamente, total, muchas de las cosas y amistades que creía tener, ya habían desaparecido tras todos éstos años.
Y comencé a evaluar mi estadía en Argentina, me di cuenta que estaba en un escenario lleno de posibilidades, poco a poco me integré al depoprte, comencé a estudiar nuevamente y me enfoqué laboralmente con más ganas, hice nuevos amigos y me abrí campo en una sociedad que, después de tantos años aún seguía siendo ajena para mí.
Entre mate y asado, entre almuerzos, salidas y viajes, comencé a fomar parte de la sociedad Argentina y sus costumbres, pronto fue cambiando el panorama y mi vida comenzó a tener un poco de sentido nuevamente.
Sin embargo, hoy donde la crisis regresó, es debido al ámbito familiar.
Y es que pasaron casi cuatro años antes de volver a ver a toda mi familia nuevamente. Para algunos ésto es inaceptable, para mí fue simplemente un suceso en el cual no tuve tiempo de pensar.
Y hoy, donde ya estoy casi completamente restaurado, me doy cuenta del gran regalo que hizo mi madre por mi y el porqué finalmente yo, pude tomar la decisión de venir a Argentina o haber ido a donde yo quisiera.
Mi madre trabajó toda su vida a doble jornada para sacarnos adelante a mí y a mi medio hermana, aunque no siempre tuve todo lo que quise y sufrí muchas desaprobaciones en mis decisiones, nunca tuve que pasar hambre gracias a los esfuerzos de mi madre.
Desgraciadamente para ambos, mi madre y yo nunca pudimos tener la relación madre-hijo que cualquiera desearía, ella trabajaba todo el día y nunca estaba en casa, mi padre se fue cuando yo era muy chico y con mi medio hermana no había una «muy buena relación».
Entonces pasé gran parte de mi infancia en las calles, a veces incluso buscando juguetes en la basura, sin figuras paternas que me guiaran a través de la importante transición niño-adolescente y tal vez por ello, me converti en un adolescente difícil y rebelde que buscaba educarse a sí mismo.
Hoy alejado de todo, autónomo, siento pena por estar lejos de casa y saber que mi madre tiene una salud que se deteriora aceleradamente, no es un hecho fácil de aceptar y me encuentro entre la espada y la pared, es una relación «no puedo/ no quiero» regresar, una dicotomía que me atormenta.
He llegado a la conclusión, que mi madre dejó todo en la cancha para que yo pudiera elegir, estoy eligiendo hacer una vida de la que se sienta orgullosa, pese a que exista una distancia física, siempre la llevo en el corazón como el motor que ilumina en éstos nublados días donde el invierno se acerca y sigo siendo transformado por la vida y la experiencia de vivir en Argentina.
Aunque sé que las decisiones de mi madre no fueron siempre las mejores y las mismas impactaron negativamente algunas áreas de mi vida, considero que no tiene la culpa, que dio lo mejor de sí y que yo, ya tengo la edad suficiente para superar éstas cosas y formarme como un hombre nuevo, dejar las culpas de lado e iniciar un nuevo camino.
Doy gracias a toda ésta experiencia, vivir aquí me ha dado madurez, fortaleza y perspectiva, mi mensaje es: Si tienen un sueño o algo que desean, no se detengan hasta alcanzarlo, sigo creyendo firmemente que la «duda» es una de las peores cosas con las que un ser humano puede vivir, no crean tampoco, que todo será color de rosas, pero para mí, pese a todo, ha valido la pena.
Amo la forma en la que te expresas enserio, te deseo lo mejor;Un beso y un abrazo desde Venezuela.
Me encantan tus Post Miguel, precisamente estoy a poco tiempo de viajar para Argentina, Mendoza y en mi corren miles de dudas y miedos pero no quiero dejar que eso me haga desistir de mi idea sin enumerar las miles de personas de mi alrededor que ven esto como una locura, tus post me ayudan a fortalecer esta idea de viaje así los nervios me carcoman, gracias de nuevo por compartir con nosotros tus experiencias 😉 esperemos que todo fluya con sus altos y bajos Saludos desde Bogotá!!!
Gracias por el saludo cata 🙂
Un abrazo!!
Miguel,
Qué gran experiencia la tuya, un ejemplo de valentía, fuerza y como a todos nos llega a pasar, con altibajos.
Llevo varios años leyendo tus artículos y siguiéndote por aquí, muchas gracias.
Te mando un abrazo grande desde México, me encantaría algún día poder conocerte en persona, soy mexicano, viví en Buenos Aires hace unos años y vuelvo para éste próximo noviembre.
Saludos,
Nick
Hola Nick, gracias por tu comentario, si venís a Argentina alguna vez tal vez podamos conocernos.
Abrazos!
Hace 1 año exactamente, tome la decisión (despues de un intento fallido meses atrás) de viajar a la Argentina, perderìa todo, familia, amigos, un trabajo en ascenso, pero aún así lo hice, aunque al llegar me topé con una enorme piedra en el camino (información confidencial como para compartirlo aqui) sigo luchando por realizar mis sueños, busco contactos, lugares, intereses y cualquier cosa que logre ayudarme a mantenerme aquí, aun mis padres me siguen ofreciendo la suerte de regresar a perú y que continúe mi vida como era antes pero sigo rechazando la oferta, se que maduraré (más) con mis errores y aciertos, tu blog (TÚ) fue el que me ayudó a entender Argentina, a saber de Argentina y a decidir venirme, comparto tu experiencia y la verdad estoy un tanto emotivo (je je) pero siempre hay mejores tiempos, «cuando se cierra una puerta es porque una ventana se abrirá».
Un enorme abrazo! y felicitaciones por todo este tiempo que te dedicas a nosotros!
Desde La Plata, Abraham.
Este sitio, estos post hacen que quienes tenemos el proyecto, de irnos el sueño de alcanzar las metas que nos hemos figurado ganemos fuerza y claridad ante la duda que como bien mencionas hace que titubeemos,eh planeado irme tal cual como tu hiciste excepto que no por amor ne mi caso y lo eh planeado desde hace mucho tiempo pero no es fácil por varios aspectos como el económico y ahora que estoy tan cerca de lograrlo a escasos 7 meses de irme el miedo a lo desconocido empieza a sembrar la duda lo cual es algo que supongo es normal en cualquier a punto de dar este paso sin embargo no me retractare en alcanzar mis metas y este post, esta pagina, este foro es un bálsamo para quienes como yo se encuentran a puertas de dar este gran paso, Grande Miguel por esta pagina y a manera personal en opinión a tu post debo decir que una madre siempre quiere lo mejor para un hijo y tener la determinación de seguir adelante y no abandonar es algo que haria sentir orgullosa a cualquier madre asi que Fuerza y para adelante sigue con el buen trabjo en esta pagina para las personas que como yo y como tu alguna vez queremos emprender este viaje en busca de todo
Hola Miguel,
Bueno hace ya un tiempo leo tu blog y te comento que tienes mucha razón, yo estoy recién saliendo de una crisis en general que nunca pensé vivir por muchas cosas que me pasaron luego de vivir 3 años a full, también pase por eso de la individualidad (salí de una relación con una porteña jaja), me cuestiono a veces si realmente lo que vine a hacer era lo que quería incluso cambie depto y otras cosas por ello. Aprendí a que los amigos son muy relativos también los de trabajo y si bien gracias a Dios no me ha ido mal en los 3 años y monedas que he vivido acá se a lo que te refieres a la familia, en mi caso nació mi sobrina y no tienes idea de como me gustaría volver a cargarla. Si bien cuesta mucho salir de las crisis, es cierto lo que dicen «lo que no te mata…» , créeme que es más fuerte el deseo de superación que otra cosa y a veces podemos caer de vuelta pero somos a la hora del té quienes los que decidimos y podemos comenzar siempre de nuevo. Te vuelves fuerte y ya no eres el mismo de antes. Un consejo es no aislarse por que eso suma también a la soledad y tampoco volverse frió, creo que después cuando sanas uno debe abrirse de a poco y aprender a ver el lado bueno de las cosas, ya que es difícil verlo. Como decimos en la costa compadre, «pa’ lante» y tal como me dijo un amigo acá nosotros a fin y al cabo somos los que decidimos por estar aquí y donde queramos.
Saludos
Perdón por algunos puntos en la redacción, escribí muy rápido por que justo salia. Saludos
Hola Miguel.
Muchas gracias por compartir tu experiencia.
A veces cuando uno se encuentra en tierras lejanas siente exactamente lo mismo que estás describiendo aunque la situación por la que se esté atravesando sea diferente.
Tus palabras nos llenan de aliento a quienes también vinimos por un sueño a este país y hemos encontrado un camino lleno de piedras y si no decir… rocas que nos golpean diariamente.
Personalmente vine a estudiar una maestría y me han sucedido muchas cosas. desde que el dueño de mi casa haya querido sacarme injustificadamente del apto en donde estaba alegando falsos argumentos sólo para quedarse con el depósito hasta que en la universidad a la que vine a estudiar me cobrara en dólares «blue» como si los extranjeros tuviéramos un arca llena de es plata y para rematar que en el trabajo en donde laboraba en «negro» me sacaran de mi puesto de trabajo a las carreras corriendo como si fuera delincuente porque había llegado una comisión de la AFIP para hacer una auditoria.
En este momento me encuentro sin trabajo, soy profesional, tengo 32 años. He aplicado a muchos trabajos y parece ser que por mi edad (es lo que concluyo después de tantos cv’s enviados, puedo estar errada)no me llaman a entrevistas. He tenido que hacer otro tipo de trabajos que aunque me han ayudado no son lo que uno desearía. Pero bueno, gracias a Dios han llegado.
A todos los que están entre la espada y la pared como Miguel o yo, que a veces también se me mete ala idea de regresarme a mi país porque me siento fracasada, les digo que siempre hay una luz, siempre hay una posibilidad y siempre habrá una nueva oportunidad y sigo aquí en pie luchando no sólo por un sueño sino por un objetivo que me he trazado. No desfallezcan, levantense y luchen.
Gracias Miguel por compartir tu experiencia y abrirnos tu corazón.
Saludos!
Hola Carolina,
Me entristece escuchar tu situación, no te alarmes, pasar por temporadas sin trabajo nos toca a todos sin excepción.
En éste artículo tengo magníficos consejos que te pueden ayudar a conseguir empleo:
https://www.viajaraargentinahoy.com.ar/1497/como-conseguir-trabajo-en-argentina
Léelo cuidadosamente y sobre todo el consejo de oro es «actualizá tu cv al menos 1 vez por semana» no es necesario agregar cosas nuevas (podés cambiar el título de una carrera un poco, acomodar textos, etc…)
Ése es uno de los grandes filtros que utilizan los que buscan postulantes (aquellos que hayan actualizado su cv en los últimos 15 días).
Y registrate en todas las páginas que sea posible.
Un abrazo y mucha suerte!
Excelente Miguel, gracias por compartirlo.
Gracias a vos por leerlo, debo mejorar mi redacción, soy un amateur con ganas de escribir de tanto en tanto.
Gracias por compartirlo Miguel. Fuerza, fe y mil bendiciones
Un saludo didiercam, un nombre conocido por acá 🙂
Reflexiones de domingo a 4.000 kms de distancia…
Justo hoy me encuentro con este post tuyo… hoy que me encuentro tan pensativa y reflexiva acerca de mi historia, que por cierto no te llegas a imaginar todo lo que tiene en común con la tuya, la que fue la razón de tu partida es igual a la mía y la forma en como conociste a aquella porteña… “por internet”… a quienes no han vivido algo tan particular como esto es difícil de explicarles lo que es enamorarse así, a través de este mundo virtual, que supuestamente no es real, pero que puede llegar a ser más genuino de lo que muchos son en su vida cotidiana… hoy me encuentro a mitad del camino de esta historia, con la diferencia que yo tuve la oportunidad de tantear el terreno antes de lanzarme al ruedo y ahora decidida a que me voy a arriesgarlo todo para ser feliz, sin embargo para los que me rodean es una completa locura y lo desaprueban en su mayoría… como todos tenemos nuestros días grises y nuestros días soleados… hoy me encuentro en uno gris… y cuando leí tu post hubo algo que me llegó tremendamente y fue cuando hablaste de “la duda”, porque justo atravieso por ese sendero de la incertidumbre y de preguntarme mil cosas, pero sobre todo me pregunto si al final valdrá la pena todo esto… obviamente espero desde el fondo de mi corazón que lo valga y sé que hay una sola forma de averiguarlo y lo voy a hacer, pese a que me genere temor o incertidumbre… nunca antes sentí algo así por alguien y esta decisión que le dará un vuelco a mi mundo en su totalidad me despierta miles de sensaciones todas parecen estar revueltas en este momento… y es que es una nueva vida, un nuevo comienzo, un nuevo mundo…
Es muy significativo poder compartir este tipo de cosas a través de este mundo virtual, en donde uno puede ser quien realmente es, sin prejuicios, sin temores a decir lo que piensa y siente y como lo siente, en donde uno puede compartir su realidad con otros y otros le regalan a uno un pedacito de sus experiencias, de sus sentimientos más profundos, de sus recuerdos, de sus temores, de sus ilusiones y sus proyectos, eso que se comparte cada vez menos hoy en día, pero que realmente es parte de la esencia de la vida… las crisis son buenas porque después de que se van nos dejan más fuertes y más maduros, nos ayudan a conocernos un poco más y nos hacen recordar que definitivamente sea cual sea el escenario… el “show” debe continuar, porque somos los protagonistas y directores de nuestra historia y quienes llegan a ser parte de ella, siempre tienen algo para enseñarnos, con dolor o con alegría, amores y desamores, unos duraderos y otros tal vez efímeros, pero que no se pierda la capacidad de amar, de dar, de abrir esa puerta para dejar que alguien toque nuestro mundo, porque aunque sea altamente peligroso dejar que alguien atraviese esa puerta también puede llegar a ser altamente tóxico mantenerla cerrada por mucho tiempo…
Un caluroso abrazo para la llegada del invierno…
Gracias Angiecastri, significa mucho para mi conocer tu historia, sinceramente espero lo mejor para vos en éste gran salto a una nueva realidad.
Te deseo lo mejor y pase lo que pase, siempre contarás conmigo y con los usuarios del foro, en éste espacio que aunque no sea tan popular al menos, nos permite coincidir en éste pequeño lapso de existencia.
Abrazos de vuelta!
hola Miguel
Lei tu historia de hoy, y hay partes en las que me siento identificada; las crisis son tan duras a veces que sentimos que no vamos a poder con ellas. fuerza y adelante.
voy para buenos aires el proximo mes y me ha servido mucho la informacion de tu blog, mil gracias por eso. un abrazo desde bogota.
Gracias Margarita.
Siempre hay cosas complicadas, pese a ello «El show debe continuar».
Me alegra que te sirva toda la info, hay mucha y siempre tenés el foro si hay dudas.
Un abrazo!
Hola Miguel.
Sigo tu blog desde antes de venir a Argentina (hace año y medio), gracias por tomarte el tiempo de recaudar tanta información que personalmente me ha sido muy útil y gracias también por compartir tu experiencia de vida y tus crisis con las que talvez muchos nos sentimos identificados , si no en todos , en algunos aspectos.Te deseo muchos éxitos y ojalá algún dia podamos coincidir para compartir nuestras experiencias como compatriotas inmigrantes.
Saludos!
Gracias Carolina, es siempre maravilloso tener la oportunidad de compartir con ustedes todo lo que conozco y un poco de mi vida personal.
Cuando quieras será un placer encontrarnos, puedes enviarme un mensaje a través de Facebook:
http://facebook.com/viajaraargentinahoy
Un abrazo!